ENTREVISTA A LÓPEZ DE VAL

Hoy os traigo una nueva entrevista al blog, la escritora López de Val ha accedido a ser entrevistada por mí. Nos cuenta sus comienzos, nos habla sobre sus libros, su proyecto, ¿Quieres conocerla mejor? Lee la entrevista y lo podrás hacer.

L.V.D: Hola, antes de nada me gustaría agradecer que pensaras en mí para cubrir esta entrevista habiendo tantas por hacer y autores interesantes por descubrir. Un beso enorme por darme la oportunidad y abrirme las puertas de este bonito rincón.

Muchas gracias por tu palabras, en mi blog siempre hay un hueco para ti, y en realidad para todos, su fin es ayudar a darse a conocer un poco más al escritor novel y mantener al veterano

¿Quién es y cómo surge –López de Val- como escritor/a?

L.D.V: López de Val es el apellido de alguien muy querido para mí, una persona que me mostró que el trabajo duro podía ser gratificante; se trata de mi abuela y decidí ponerme su nombre como autora por respeto y admiración hacia ella y su memoria…

Mi nombre real es Eugenia Torres, una chica a la cual siempre le ha gustado crear historias, aunque no todo el mundo (más bien casi nadie) conocía esta faceta, es algo que siempre he llevado conmigo y he guardado muy celosamente.

¿Cuándo comenzó el deseo por escribir?

L.D.V: Creo que con esto se nace, al menos conmigo ha pasado así, aunque debo admitir que mi recorrido en los estudios siempre han ido acompañados de grandes docentes que han hecho que mi amor a las letras y a la literatura se intensificara.

También he tenido una imaginación muy activa desde siempre, soñando despierta con otras vidas, es más, por ahí anda todavía un cassette donde aparece mi voz pueril grabada contando un cuento con bastante intensidad… Jajajajaja.

¿Con qué género te identificas más a la hora de crear tu obra?

L.D.V: Aunque parezca mentira debido a mi primera obra que vio la luz en forma de bilogía romántico-erótica, el género donde mas cómoda estoy y donde siento que mis dedos se pasean por el teclado como si mis yemas se deslizaran suavemente sobre una manantial en calma es en el que la mujer se supera a sí misma y a los obstáculos que la vida puede poner en su camino, de esta manera, confieso que no hay una rama en la que pueda ubicar mi obra, resumiendo que sería algo así como superación personal con tintes románticos, sin basar toda la obra en el amor romántico, sino que además de este surge otro más poderoso y el que creo que todos deberíamos llevar a cabo, el amor a uno mismo.

Además de escribir, ¿dedicas tiempo a leer obras de otros autores?

L.D.V: Un rotundo sí. Una media de un libro por semana, aunque si tengo tiempo leo dos.

Hay algo que he aprendido y que además llevo a cabo y lo aconsejo a todas aquellas personas que quieran probar suerte en esto de las letras, para escribir hay que leer mucho y escribir mucho, así es la única forma en la que conocerás qué es aquello que no debes hacer, aquello que no debes imitar, y aquello que es acertado, eso que gusta al paladar de la mente, pero eso sí rehúsa imitar, tus escritos deben ser genuinos, deben llevar tu marca para hacerlos únicos.

¿Cuál o cuáles son tus escritores preferidos?

L.D.V: Hay bastantes escritores a los que les agradezco su vocación, puesto que con sus obras me han hecho vivir otras vidas, han logrado hacer florecer en mí sentimientos de distinto tipo logrando que haga mía sus historias. Como rareza se encuentra Pluvio Ovidio Nason, por la delicadeza con la que trata a sus seres Divinos y terrenales; Sylvain Reynard, por la forma en que me hace vibrar el corazón, y un no muy largo etc., donde también puedes encontrar a autores auto publicados, talentos en la sombra que hacen más rica mi biblioteca.

¿Han influido estos autores en tu forma de escribir?

L.D.V: De alguna forma sí, no en imitarlos pero sí en animarme a hacerlo bien y tratar de despertar sentimientos tal y como ellos han hecho en mí; en respetar mi idioma, su riqueza, las diferentes formas en la que jugar con él; en tratar de desnudar mi alma y la de mis personajes durante el transcurso de la obra; intentar hacer que mis lectores se vean reflejados en ellos, en sus emociones, en sus vivencias…

¿Qué lugares prefieres para redactar tu obra?

L.D.V: El salón de mi casa, desde donde hay unas vistas estupendas a la ciudad, el mar y a la montaña, allí dejo mi mente vagar preguntándome qué vidas llevaran los transeúntes que van a sus trabajos, qué será de aquella madre que deja a su hijo en el colegio, qué de aquel hombre que va con maletín o qué de aquella pareja que se dirige en moto al hospital. Y es que hay un tesoro a nuestro alrededor que podemos explotar fantástico para un escritor.

Además de –Los fantasmas de mi cajonera-, ¿has publicado anteriormente otras de tus creaciones?

L.D.V: Sí. Se trata de una bilogía romántico-erótica donde su primera parte se titula Doble o nada y su secuela Todo o nada, se trata de un trío amoroso bastante diferente a lo ya publicado.

Háblanos de – Los fantasmas de mi cajonera -.

L.D.V: Los fantasmas de mi cajonera son aquellos que a todos nos acompañan, aquellos que se van colando en nuestro corazón con el paso de los años y las experiencias vividas, aquellos que pueden atormentarnos si se lo permitimos, esos que por más que lo intentemos no nos dejan, pero que si nos lo proponemos podemos vencerlos rebajándolos a la etiqueta de meros recuerdos.

 

¿Cómo surgió esta obra?

L.D.V: Esta obra surgió de algunos de mis fantasmas, por ello digo que más que una obra de ficción es una confesión, algo que me atormentaba y que he logrado superar. A ver, no digo que sea una obra autobiográfica pero tiene bastante de mí. 

¿En qué te has basado para escribirlo?

L.V.D: En la realidad.

¿Los personajes son completamente inventados o están basados en alguien real?

L.D.V: No se trata de alguien real, pero de alguna manera todos somos Manuela, porque como ya he dicho por ahí, todos tenemos nuestra propia carga de fantasmas, puede ser como el peso de Manuela, o puede que sea por ser bajo, por el color de ojos, por ser diferente a lo que la sociedad espera etc.; seamos realistas y confesemos que algún fantasma hay por ahí surgiendo de vez en cuando para atormentar nuestra alma, ya depende de nosotros mismos permitir que lo haga él o que lo hagan los demás. Todo se resume a eso, permitir que te destruyan aquellos que también tienen sus penurias aunque intenten aparentar que no es así, o dar de lado a esos oscuros sentimientos cargados de frases negativas y seguir adelante dejándolos susurrar al aire, el mismo que se llevará sus suspiros ahogados por tu risa.

¿Te identificas con alguno de tus personajes?

L.D.V: Con Manuela.

¿Consideras que estar inspirada es algo fundamental a la hora de escribir?

L.D.V: Por supuesto, jamás he escrito obligándome a sentarme frente al ordenador, yo no funciono así y creo que el resto tampoco, y si a alguien le resulta la ecuación y encima lo que escribe es fructífero me alegro por él y le envidio, porque ya te digo que para mí es imposible.

Cuando me encuentro con el famoso bloqueo de autor lo mejor que hago es parar y esperar a que llegue el momento, que por cierto siempre llega aunque piense que estoy vacía y que ya no hay más para dar siempre vuelve y no te puedes imaginar todo lo que escribo el día en que eso ocurre, es como hacer una maratón por el miedo a que se vaya la inspiración otra vez. Ese día las preguntas por parte de los míos se suceden: “¿cuándo va a estar la cena?”, “mamá,  ¿me vas a bañar?”, el perro al lado esperando a que lo saque a pasear y yo respondiendo a todos lo mismo: “sí, sí, ahora voy, dame dos minutos”, lo que traducido son horas y dolor de trasero de tanto escribir, más comida a domicilio y un niño sucio metido en la cama. Jajajajajaja.

¿A qué personas recomendarías tu libro especialmente?

L.D.V: A aquellas a las que les guste ver la vida tal y como es, contada bajo un manto de risas y emociones del día a día.

¿Cuándo crees que un libro está terminado?

L.D.V: Cuando en mi cabeza aparece la cabeza fin. Y, además, es curioso porque cuando eso pasa ya no hay vuelta atrás, no añado aunque sí puedo suprimir.

¿Existen muchas dificultades a la hora de publicar tu obra? En caso de que la respuesta sea afirmativa, ¿cuáles son las principales barreras?

L.D.V: En realidad hoy en día no se encuentran las mismas dificultades que en años anteriores, la auto publicación es algo que está al alcance de cualquiera así que realmente no encuentro ninguna zancadilla, tan solo las que yo misma me creo por inseguridades, cosa que se solventa pronto.

¿Consideras que  tus obras han tenido el éxito que esperabas?

L.D.V: Considero que me han devastado sus éxitos, porque para nada me esperaba que se interesaran por mi trabajo más de un millar de lectores, sobre todo por la variedad que hay en el mercado y los precios tan asequibles. Siempre me he visto como una hormiga en un mundo de titanes, el resto ya te lo puedes imaginar.

¿Tienes planteado seguir escribiendo?

L.D.V: Sí. Aunque no publique siempre seguiré escribiendo, está innato en mí. Es como el que toca la trompeta por amor, jamás lo dejará, aunque no tenga el instrumento, en su cabeza siempre tendrá un momento dedicado a la música y puede que sin darse cuenta mueva sus dedos creyendo que tiene en sus manos la vía por la que hacer escapar el aire y producir así las notas que lo hacen grande. Lo mismo pasa conmigo, siempre estaré creando mundos, aunque vaya en el autobús, aunque esté haciendo deporte un pensamiento siempre estará creando nuevos mundos e historias, porque sin ellas ya no sería yo, aquella chiquilla con una fantasía desbordante.

¿Qué es lo próximo que te gustaría escribir?

L.D.V: Estoy escribiendo una nueva historia de superación bajo una capa de humor, pero todavía es pronto para saber hacia dónde me llevaran los pasos de su protagonista, ella es la que me susurra su historia por lo tanto poco puedo decir más, tan solo que nunca es tarde para emprender un nuevo camino…

¿Hasta dónde llegan tus aspiraciones?

L.D.V: En realidad no lo sé. Lo que tengo claro es que espero que mi trabajo llegue a muchos y que disfruten con él, que al menos en el rato que se lean mi libro se olviden de problemas y tan solo lo pasen bien, y que luego con el paso de los años alguna que otra vez recuerden aquel libro que escribió una tal López de Val.

Que bonito ese pensamiento tuyo, tiene que ser precioso y emocionante pasar a la historia y que te recuerden por lo que has hecho.

¿De qué manera te afectan las críticas (buenas o malas) de los lectores hacia tu libro?

L.D.V: Trato de sacar partido de cada una de ellas y aprender de aquello por lo que sea criticado negativamente, aunque he de confesar que no he tenido casi ninguna negativa. 

Finalmente, describe tu libro al lector con una sola palabra.

L.D.V: Podría definir a Los fantasmas de mi cajonera como VALENTÍA pero sería insuficiente, con tu permiso lo definiré en tres: VALENTÍA y AMOR PROPIO.

L.V.D: Por último quisiera reiterar mi agradecimiento a ti por la entrevista y a mis lectores por estar ahí, vosotros me hacéis sentir especial. Besos enormes.

De nuevo te doy las gracias a ti, por formar parte de mi blog, y permitir que todos te conozcamos un poco más a través de él. Un fuerte beso.