LA PRINCESA DE CENTRAL PARK "JOANA ARTEAGA"

 

SINOPSIS: LA PRINCESA DE CENTRAL PARK 

Diana Nesterenko se gana la vida con un buen puñado de minijobs, de esos que no dejan muchos dólares en el bolsillo al final del día. Con el único objetivo de acabar sus estudios tardíos y forjarse un futuro alejada de una infancia traumática, en su currículum destacan trabajos como paseadora de perros o regadora de plantas.

Pero en un servicio de catering desastroso todo eso va a cambiar. Porque el destino la coloca en el radar de Saul J. Coleman y su mejor amiga, Martina, que se empeñan en cambiar la suerte de una Diana a la defensiva.

Un sustancioso cheque semanal, un revés médico con complicaciones, una ONG muy singular y una boda secreta, acabarán por colocar a Diana y a Saul justo en la misma página, mientras esperan la gran nevada que no llega.

No te pierdas la historia de Diana, una mujer temperamental con el corazón del tamaño de Ucrania, una auténtica princesa plebeya a punto de encontrar a su príncipe azul.

Emocionante, romántica, diferente... una novela que te tocará el corazón.

COMPRAR KINDLE:La princesa de Central Park

COMPRAR EN PAPEL: La princesa de Central Park.

Como siempre comienzo cada reseña dando las gracias. Gracias Joana por confiar en mí, una tercera vez para leer tu novela. 

ATENCIÓN: Esta novela es la última entrega de la serie de las 'Chicas de Bleecker Street', de la que también forman parte 'El mundo, contigo' y 'Juntos somos invencibles'. Aunque no suelo en mis reseñas hacer spoilers, es probable que en esta sí que encontraréis algunas pinceladas que harán que descubráis la clave de “El mundo, contigo” por eso aconsejo no leer si anteriormente no has leído sus dos predecesoras. 

No me podéis negar que la portada es muy bonita. Si tuviera que elegir alguna de la serie sería casi imposible, pero si ya me apuntan con una pistola pues me decanto por esta sin duda alguna. En común tienen las tres los corazones. Si es que el interior es todo corazón.

¿Recordáis a Saúl J. Coleman Junior? En esta novela una vez más vuelve a ser nuestro protagonista. Como olvidar al hombre correcto, pulcro, con unos modales exquisitos y un dialecto propio del siglo XV, por lo menos. Diana Nesterenko aparecerá en su vida por casualidad y se anclará por completo en ella. Nuestra protagonista es un culito inquieto con miles de trabajos fugaces que le ayudan a costearse el alquiler de su piso y a subsistir. En una cena conoce a Martina y a Saul, anfitriones de la velada, tras un pequeño desencuentro que tiene con el jefe del catering en el que ella trabaja. A partir de ese momento Saul no dejará de inmiscuirse en su vida ofreciéndole un trabajo a simple vista sencillo y muy bien remunerado. 

Las cosas parecen ir sobre ruedas hasta que Diana recibe el primer cheque de sus honorarios sin haber trabajado, eso hace que nuestra protagonista se encienda y le salga humo por las orejas de lo enfurecida que se pone. Diana tiene un carácter muy fuerte y no le gusta que le regalen nada, como trabajadora no hay quién le gane y como dice el dicho; a trabajo hecho trabajo pagado.

A partir de ahí comienza la relación amor-odio entre Saul y Diana. Ella intentará por todos los medios que nuestro protagonista sea menos correcto y que su imagen salga fuera de  su habitual elegancia y despeine de vez en cuando su perfecta vida. A Saul le cuesta mucho salirse de su rol, ¿conseguirá cambiar por la señorita Diana?  

 

La vida pasada de nuestra protagonista logrará encogernos el alma pero la balanza es nivelada por los accidentes fortuitos que provoca el pequeño monstruito de Saskya. Pena y humor, ambos sentimientos que tendremos ante estas subtramas que posee la novela.

La novela está narrada en primera persona por Diana, casi en la totalidad de sus capítulos. La escritora nos engatusa con un lenguaje pulcro, dinámico y actual. Nos va contando poco a poco la vida de cada uno de sus personajes consiguiendo que quieras formar parte de sus vidas. Los escenarios están perfectamente narrados haciendo posible visualizar en nuestra cabeza cada una de las imágenes que se describen en el libro. Los personajes, tantos secundarios como principales, están perfectamente sincronizados los unos con los otros, haciendo qué, la historia no fuera completa si faltase alguno de ellos. 

A pesar de que la novela en sí ha sido una completa gozada y que se le de una sentada, reconozco que ha habido algunos capítulos que se me han hecho algo pesados y monótonos.  Al igual que he echado de menos más diálogos en el libro. Al ser narrada en primera persona Diana habla mucho pero claro se convierte en un monólogo cuando no tiene conversación con el resto de personajes. 

El final de la novela me ha entusiasmado. Vamos viendo la transformación que logra Diana en Saul, como se suaviza cada uno de sus miedos y como se disipan sus dudas. Una gran novela, sin duda, que aconsejo leer al 100%